Vinilos… (XLVII) “Wish you were here”, Pink Floyd

En su noveno álbum Pink Floyd se enfrentaban a lo mas duro tras alcanzar la cima, mantenerse y no defraudar. “Wish you were here” había ido naciendo durante la gira de 1974 y el grupo intentaba ajustar cuentas con la crítica al tiempo que rendían tributo a Syd Barret (Roger Keith Barrett, (Cambridge 1946-2006), su antiguo líder y fundador. A pesar del enorme torbellino en el que se encontraban David Jon Gilmour (Cambridge, 1946), Nicholas Berkeley Mason (Birmingham, 1944), George Roger Waters (Surrey, 1943) y Richard William Wright (Londres, 1943-2008) volvieron a demostrar por qué eran el grupo mas sólido del rock progresivo y psicodélico. Auténticos líderes de la música en los ‘70. Si con “The Dark Side of the Moon” habían logrado el número 1 en las listas de medio mundo, incluidos USA y el Reino Unido, obteniendo 13 discos de platino (mas de 13 millones de ventas), con “Wish You Were Here” casi lo repiten… Volvieron al primer puesto de las listas y esta vez se quedaron con “apenas” 5 millones. Volverían a la locura de las ventas con “The Wall” dos años mas tarde y otros diez platinos. 

Portada de "Wish you were here"

En 1975 se encerraron en los Abbey Road Studios de Londres y se lanzaron a desarrollar los que habían ido plasmando, estudiando y componiendo meses atrás. En esta ocasión no iban a contar con la colaboración de Alan Parsons que ya estaba trabajando su “Project”. Pero el trabajo no iba a ser fácil ni sencillo; había disensiones en como tratar “Shine on you crazy Diamonds” si en una, dos o mas partes. Se trataba del tema central del disco y estaba dedicado a Syd Barrett que había tenido que dejar la banda por varias crisis producidas por el consumo de drogas. En esta ocasión contaron con la colaboración de Roy Harper para interpretar “Have a Cigar”. El diseño artístico corrió a cargo de Storm Thorgerson. 

“Wish You Were Here” se había estrenado en Julio de 1975 en el festival de Knebworth, pero el disco no se publicaría hasta el 27 de septiembre. La revista Rolling Stone lo ha considerado como uno de los 500 mejores álbumes de la historia. Para Richard Wright y David Gilmour, “Wish You Were Here” es su álbum favorito.​ Además del homenaje a Barret se trata de una crítica a la industria musical, más interesada en el éxito que por el cuidado artístico y creativo.​ En el álbum también se manifiesta el carácter de Waters como idealista por un lado, pero con una personalidad dominante que acarrearía problemas de relaciones entre sus miembros, principalmente con Nick Mason. 

El éxito de "The Dark Side of the Moon" les había dejado agotados emocional y físicamente. Para Wright las primeras sesiones fueron un periodo difícil, para Waters fueron una tortura, a Mason el proceso de grabación le pareció tedioso, al tiempo que su matrimonio había fracasado, y Gilmour estaba más interesado en mejorar el material ya existente que en crear algo nuevo. Finalmente surgió la joya que Waters esperaba tomando como base lo que había surgido en la mencionada gira del ‘74. Cuando la obra llegó a los medios y la consiguiente puesta en escena demostraron que seguían transcurriendo por la cima a la que habían llegado con “The Dark Side of the Moon”, mantendrían con “Animals” y superarían con “The Wall”. 

Pink Floyd fue elegida como la «mejor banda de rock de todos los tiempos» en una encuesta hecha por Planet Rock en 2005. En la actualidad, Pink Floyd se ha convertido en un grupo musical de culto que suma millones de fieles adeptos a su música alrededor del mundo. El grupo entró en el Rock and Roll Hall Of Fame en 1996.

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