Escenas de Guadalest

Pantano de Guadalest

Recorrer la Marina Baixa es un regalo para la vista y los sentidos en días como hoy en los que el sol se alía con el azul del cielo, y algunas nubes se solidarizan con el paisaje para crear un conjunto que, con la montaña premia a los afortunados -la inmensa mayoría guiris y algunos "nativos"- para disfrutar del espectáculo de la naturaleza.

Puede suceder que el pantano de Guadalest se muestre casi al completo de su capacidad y, recorriendo las callejuelas del pueblo te encuentres un mimo triste de ojos cerrados que al reconocer el turista su arte muestra su alegría abriendo los brazos y regalando una sonrisa. 

Te puedes encontrar establecimientos de 

Castell de Guadalest

productos típicos o unos niños jugando al jokey detrás del ayuntamiento, gritando, ora en castellano ora en valenciano, distribuyéndose papeles de jugadores de fútbol, de baloncesto, de la liga americana o simplemente puestos en la cancha. Una mochila y unos deportivos a la puerta de la escuela pública terminan por decorar la escena.

Mimo triste antes de...

Los lunes fuera de temporada te puedes encontrar cerrado el museo de la miniatura, único en el mundo, pero siempre tienes abierto el de los saleros y pimenteros con mas de 20.000 productos en exhibición. Bajando por las escaleras a la izquierda se abra la vista al mar al fondo desde la terraza de un restaurante que te ofrece lo mejor de los productos de la tierra como los embutidos de la sierra, unas croquetas de bacalao o una nueva olleta. 

Calles y museos y museos...

Plaza de San Gerónimo

El visitante se siente afortunado de disfrutar del momento, del viaje, la compañía, del regalo de la naturaleza y como decía un amigo de lo que da la felicidad; ser dueño de tu tiempo.


Seguiremos informando de los regalos de la vista y los placeres que se ofrecen cada día... "Mañana" mas.