Nunca... (83) La noche de Don Vicente Marco Orts

La evolución de los programas, la -cada día- mayor importancia de la redacción de informativos, producida entre otros motivos por el frenesí de la actualidad, y la competencia con Radio Nacional y la renacida Cope de la mano de dos gestores que tendrían una determinante influencia en la radio moderna como Eugenio Galdón y Jorge Planas hicieron que Radio Madrid entrara en un frenesí de obras para montar nuevos estudios de grabación y emisión. Los tres estudios de la novena planta con el 1 para las radionovelas, que salvo Los Porretas y poco más ya no se emitían, 2 y 3 para grabaciones, y los cuatro de la segunda, el 5 (cadena), 6 y 7 (continuidad) y el 8 (FM) eran insuficientes.

A la vuelta del verano se habían habilitados dos mas en la redacción, uno al lado del despacho de José María García, y el antiguo estudio de la FM del fondo del pasillo. El tercero se había montado en lo que en su día había sido el Servicio de Radio para todos de Radio Madrid, a la izquierda de la entrada de la segunda planta dónde además del nuevo y flamante estudio de FM preparado para emitir por fin ya en stereo, se había habilitado una sala de espera para las visitas.

Momentáneamente, y mientras se creaban otros nuevos, el último trimestre de 1980 realicé el programa en ese nuevo estudio de la entrada. Hasta comienzos del año siguiente no me trasladé al que sería el definitivo del programa, de nuevo el famoso “8” del fondo del pasillo que, al haber menos actividad por la noche, se dedicó definitivamente a la programación nocturna.

Martín Morales

Así me veía un amigo

En ese “provisional” autocontrol tuve el honor de entrevistar a Vicente Marco con motivo del Premio Ondas que le habían concedido por Carrusel Deportivo, el estreno europeo para la radio de la Banda Sonora de la película de Richard Fleischer y Sidney J. Furie protagonizada por Neil Diamond y Sir Laurence Oliver, el remake de The Jazz Singer -del que hablaré cuando llegue su estreno en el cine Avenida- que el artista neoyorquino había grabado para la Capitol, o dar junto a Javier Suárez la noticia de la muerte de John Lennon y no poder realizar la entrevista de Martín Morales.

Unos días antes de hablar con Vicente Marco cerré la entrevista con un amigo común de Javier Palomero, Joaquín Abad y Romualdo; Francisco Martín Morales. Íbamos a aprovechar una breve estancia del caricaturista almeriense en Madrid para recordar viejos tiempos con amigos comunes de la facultad, pero finalmente no pudo producirse al tener que marcharse rápidamente a Granada, donde ya residía, pero me dejó uno de los mas bellos recuerdos con la mejor disculpa posible por no poder acudir a la entrevista; mas allá de la amistad me regalaba el mayor de los elogios: La noche es mía. Y a fe que su frase se había hecho realidad en apenas un año. Quería haber recordado sus comienzos en El Ideal de Granada, el Nuevo Diario Madrid, El Jueves o la revista Por favor. Quería que la audiencia conociera de cerca a un hombre que precisamente no era muy dado a los personalismos, pero siempre me quedé con el deseo de la entrevista no realizada y su disculpa en forma de viñeta. Yo salí ganando porque esa lámina-viñeta-disculpa me acompañará siempre.

Don Vicente Marco Orts

En Noviembre, como todos los años, se dio a conocer el fallo del Jurado de los Premios Ondas, y en la edición de 1980, junto a Fernando M. Argenta (RNE), Joaquín Tagar (RNE), José Luis Bengoa, Onda Pesquera (Jesús Ferreiro de Radio San Sebastián), una jovencísima María Teresa Campos (Radio Juventud de Málaga), series como Fortunata y Jacinta, o programas como Mas vale prevenir, se reconocía el mérito, la profesionalidad y el trabajo de Vicente Marco como director de Carrusel Deportivo, y por tal motivo le pedí que viniera a compartir su premio con los oyentes nocturnos.

Como muchos grandes de la radio Vicente Marco Orts había nacido en Valencia, hijo de Vicente Marco Miranda, uno de los políticos valencianos mas significados de la II República, su vida habría sido la de un desconocido mas -como me reconoció- de no haber sido por un concurso de la radio que cambiaría la suya y la de toda una generación de grandísimos profesionales, Tu carrera es la radio, organizado por Robert Steiner Kieve, del que salieron Pedro Pablo Ayuso, Joaquín Peláez, Julio Varela, Maribel Sánchez, Juana Ginzo, Carmen Mendoza y guionistas de la talla de Guillermo Sautier Casaseca, Rafael Barón y Luisa Alberca.

Me recordó, como bien recoge Juana Ginzo en Mis días de radio, que uno de los primeros trabajos que hizo en el medio fue interpretar a Judas en una recreación de la Pasión en Semana Santa, a pesar de no verse en el papel de “un malo”. Me habló de sus primeros guiones, de la adaptación que hizo para la radio de la Premio Nobel Marie Curie, y principalmente de la llegada de Bobby Deglané a España, y a Radio Madrid en particular. Recordó como se montó Carrusel Deportivo y las dificultades técnicas con  las que tenían que trabajar. Hay que recordar que en aquellos tiempos -1954- no había muchos telefónos, las líneas microfónicas no se conocían aún y los redactores de las emisoras tenían que ir a los bares mas cercanos para “cantar los goles” con varios minutos de retraso, lo que dejaba bastantes sorprendidos a los parroquianos. Solo en Madrid, Barcelona, Valencia, Sevilla, Zaragoza, Alicante y poco mas los corresponsales de Carrusel deportivo tenían cerca un teléfono en los primeros años.

Me recordó que Carrusel Deportivo se emitía solo los domingos por la tarde con una duración de poco mas de tres horas, pero la idea de Bobby enseguida se adueñó de la magia de la tarde de los domingos y hasta casi 25 años después no pasó a emitirse los sábados, a raíz del enorme crecimiento del baloncesto. Escucharle con la pasión comedida –es cierto- con la que hablaba de aquellos primeros años en compañía de Bobby, de Juan de Toro y Pepe Bermejo, entre otros, no impedía que los ojos le brillaran de emoción, pero el momento que mas disfrutó de la conversación fue cuando sacó sus discos.

Me habló de su padre, un republicano hasta la médula que llegó a ser alcalde de Valencia y mas tarde Gobernador en Córdoba, del hijo que tenía con síndrome de Down y las campañas en las que se involucraba para integrar a esas personas en la sociedad, pero no le gustaba de hablar de temas personales. Guardaba celosamente su intimidad.

Yo sabía que era un amante del flamenco, no en balde el era el guionista de Tablao, un programa que se emitía los sábados por la noche, primero y mas tarde de madrugada en cadena. El había conseguido, a pesar de la censura, incluir en la programación Antología del cante jondo, después de tener que explicar a propios y censores que el flamenco era algo muy serio y merecía ser incluido en la programación, cuenta Juana Ginzo. En aquellos años 70 la inmensa mayoría de la gente había escuchado a Paco de Lucía, Manolo Sanlucar o Paco Cepero, pero solo los muy aficionados conocían y habían escuchado a Agustín Castellón Campos, Sabicas, auténtico impulsor de la guitarra española y uno de los que mas hicieron por la internacionalización del flamenco. Se sentó a mi lado y mientras sonaba la música del maestro él me resaltaba los momentos mas deslumbrantes de la técnica y pasión del guitarrista.

Ahora podría resaltar los valores de este gigante de la profesión, pero le traicionaría en su modestia porque precisamente Vicente Marco fue todo e hizo todo en la radio, guionista, narrador, presentador de programas, etc. y como hoy se diría fue una megaestrella, pero destacaba principalmente por su sencillez, humanidad y bien hacer, siempre alejado del ruido demostrando que se puede ser el mejor sin gritarlo, simplemente haciendo bien y lo mejor que sabes tu trabajo, y sabiendo rodearse de los mejores.

Fue una noche en la que me sentí honrado por conocer mas a fondo y trasladar a la audiencia la auténtica dimensión de uno de los mas grandes profesionales de la historia de la radio en nuestro país, como se lo reconoció el Jurado de los Premios Ondas en 1999 al ser designado como uno de los diez profesionales mas importantes de la historia de la radio al cumplirse el 75 aniversario del medio en España y recibir uno de los diez Ondas especiales, que compartió con Jesús Hermida, Matilde Conesa, Antonio Calderón, Joaquín Soler Serrano, Alberto Oliveras, Matías Prats, Juan Viñas, Raúl Matas y la mencionada Juana Ginzo.