Antes del derby madrileño de hoy
Vaya por delante que siempre he considerado los encuentros entre el Real y el Atlético como los auténticos derbys. Desde mi infancia los vivía como José Ramón de la Morena ha contado muchas veces, con la intensidad y rivalidad que se transmitía en las emisoras de radio, la prensa deportiva, las cafeterías y peluquerías. Entonces no había tantas quejas de arbitrajes y "pupas", la rivalidad estaba en quien había jugado mejor o peor, si la lluvia torrencial había dejado jugar a unos mejor que a los otros, ya fuera en el viejo Metropolitano, Chamartín o Calderón, pero aquellas épocas pasaron y dando un salto en el tiempo y, tras mas de 13 años de maleficio rojiblanco llega un nuevo encuentro entre los dos equipos del "foro".
Quien sabe lo que ocurrirá esta noche sobre el césped del Bernabeu. Lógicamente tengo mis íntimos deseos de que los merengues se impongan a los colchoneros, pero debo reconocer que este enfrentamiento me llega con el paso cambiado porque me molesta hasta indignarme la gestión deportiva del entrenador blanco, así como admiro el espíritu que Simeone ha trasladado a sus jugadores, como en su momento admiré lleno de envidia el fútbol que Guardiola llevó a Barça (el otro gran rival) porque ese era el fútbol que hasta la marcha de Pellegrini practicaba mi equipo desde sus orígenes al margen de resultados porque el juego de los blancos siempre fue el toque y el gusto exquisito por el trato del balón
Me admiró la forma en que el Atlético de Madrid enfrentó las dos finales que ganó la pasada temporada porque no engañó a nadie, y demostró desde el primer momento el hambre de balón, juego y títulos, sin afectaciones ni divismos. Si le marcha del estado actual de las dos formaciones sigue su curso es posible que nos encontremos esta noche ante un cambio de la historia y el club del Manzanares por fin se lleva una alegría.
El famoso taconazo de Di' Stefano |
En cualquier caso esta noche nos encontramos ante un nuevo derby de la capital y por fin se vuelve a vivir como los recuerdo desde niño. Mañana se hablará de las ocasiones, los fallos, los penaltis, los árbitros... pero habrá sido divertido porque hacía mucho tiempo que no se llegaba a un encuentro tan hermoso como puede ser el de esta noche. Lo mejor para la salud del fútbol es que gane el mejor y con ese deseo me sentaré ante la tele, esperando que el mejor sea mi equipo a pesar de que su entrenador me haya echado del Bernabeu.
Se que en este comentario hay muchos contrasentidos y sentimientos enfrentados, pero que quieres, uno sigue siendo merengue a pesar de su entrenador y el juego que practica porque de color futbolístico es de lo único que no se cambia en esta vida.
A pesar de todo ¡Hala Madrid!
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