236/ 11 de Septiembre
¿Quien podía imaginar cuando se decidió el slogan de la campaña de la nueva temporada que ocho días después se haría realidad aquello de "Si algo pasa está la Ser" para contarlo... Hay sucesos tan trascendentales en la historia que nos marcan indeleblemente a todos. De ahí que nunca olvidemos dónde estábamos o que hacíamos en el instante en el que nos enteramos de dicho acontecimiento, más aún si lo vives en directo.
La mañana del 11 de Septiembre transitó con el disgusto, cabreo e indignación por el tratamiento de El País al concierto exclusivo de Elton John en Los 40 la tarde anterior. A mediodía había quedado con Manu Martín como hacíamos todos los meses para hablar sobre la profesión, la radio, la tele, el Grupo en general y -sobre todo- los temas personales. Era una buena terapia contar con un amigo –en ocasiones se nos unía Marta García- con el que desahogarte o disfrutar. Íbamos acuñando aquello de “si te preguntan que tal estas, contesta siempre que muy bien, porque el amigo se alegra y al adversario le molesta… El tenía mucho que contar sobre su experiencia en Localia que empezaba a ser decepcionante, mientras yo le trasladaba mi ansiedad por la situación de mi matrimonio.
La mañana del 11 de Septiembre transitó con el disgusto, cabreo e indignación por el tratamiento de El País al concierto exclusivo de Elton John en Los 40 la tarde anterior. A mediodía había quedado con Manu Martín como hacíamos todos los meses para hablar sobre la profesión, la radio, la tele, el Grupo en general y -sobre todo- los temas personales. Era una buena terapia contar con un amigo –en ocasiones se nos unía Marta García- con el que desahogarte o disfrutar. Íbamos acuñando aquello de “si te preguntan que tal estas, contesta siempre que muy bien, porque el amigo se alegra y al adversario le molesta… El tenía mucho que contar sobre su experiencia en Localia que empezaba a ser decepcionante, mientras yo le trasladaba mi ansiedad por la situación de mi matrimonio.
Manu recordaba que “aquel martes de septiembre llevaba ya nueve meses trabajando en Localia, 7 plantas más abajo de donde estaba la SER. Comimos con normalidad y sobre las 3:15, cuando íbamos a pagar, en una de las pantallas de televisión del restaurante vimos una de la torres gemelas de Nueva York en llamas…”
La señal era del Telediario de TVE. No oíamos a Ana Blanco, pero si pudimos leer el rótulo que decía algo así como "Un avión se estrella en el WTC de Nueva York". Sorprendidos salimos rápidamente hacia la radio. Manu recordó una película de serie B que había visto hacía muchos años sobre un avioneta que se estrellaba en un rascacielos y había que rescatar a los supervivientes dentro de la nave. Me lo contó en medio de la excitación por la noticia mientras subíamos corriendo por Gran Vía. Hacía el calor de septiembre en Madrid. No habíamos llegado al cruce con San Bernardo cuando Paloma me llamó llorando. Estaba aterrorizada. Acababa de ver en el telediario como una “avioneta” –decían- se había estrellado en una de las Torres Gemelas del World Trade Center de Nueva York... Al llegar a la radio casi ni nos despedimos; Manu se quedó en la primera planta y yo seguí hasta la octava.
En la radio
Carreras por los pasillos de redactores que iban y venían entre la redacción y el estudio, caras desencajadas, y todos los monitores de televisión encendidos conectados con todas las cadenas, principalmente con CNN+ que mantenía señal constante con la central en Atlanta. Llamé a Marisol y Elena que se habían marchado a las dos y media y regresaron al momento. Entré al control del Estudio 5 (Continuidad) encontrándome el lógico estado de excitación y asombro, pero al mismo tiempo que se agolpaban llamadas telefónicas, entrantes y salientes, la incertidumbre y el asombro servían para ir dando la información con precaución, intentando en todo momento que lo que saliera en antena estuviera lo suficientemente contrastado, dentro de la ingravidez de estar contado en directo lo que estaba sucediendo sin tener ninguna noticia de fuente solvente alguna. Las comunicaciones a través de los móviles en Estados Unidos se habían cortado. Todo el mundo estaba en shock, y cuando escribo todo el mundo se puede apreciar en el audio de las dos primeras horas que recientemente me pasó la -entonces- jefa de documentación de la Ser, Ángeles Afuera…
Escuchar el transcurrir de aquellas dos primeras horas, minuto a minuto, lo que Javier del Pino le podía ir contando a José Antonio Marcos sigue siendo estremecedor y admirable. Esos primeros instantes en los que las imágenes de lo que parecía ser una avioneta, que “perdida”, se estrellaba contra una de las Torres Gemelas, las horas previas de un partido del Real Madrid y la Roma en la Champions, la Vuelta Ciclista, el caso Gescartera,… como todo iba cambiando en función de cada información, hasta la confirmación del tremendo drama en las dos primeras horas es, quince años después, volver a sentir la fuerza de la palabra, de la radio.
La dimensión de lo ocurrido refleja claramente como se desarrolló el relato informativo que podían ir realizando tanto Del Pino, desde su “incomunicación” en Washington, como Marcos con las imágenes que iban recibiendo al mismo tiempo que los espectadores y oyentes. Mientras se producían las entradas de Ernesto Estévez, jefe de internacional, y Eva Cuesta con entrevistas improvisadas sobre la marcha para ir recabando información, las sospechas de atentado… El anuncio de la evacuación de la Casa Blanca hasta el ataque contra el Pentágono… Todo coordinado por Ferreras e Irago.
Una de las primeras intervenciones en la antena, de la que hicimos la primera nota de prensa en el gabinete fue la del vicepresidente de la Base Naval de Rota, Jesús Mª Serrano, que confirmaba la existencia de movimientos en las tropas norteamericanas durante la mañana. Horas antes de los acontecimientos… Serrano había “apreciado en el ‘One’, edificio considerado como el centro neurálgico militar de la Base Naval de Rota de control norteamericano, la presencia de marines apostados en la parte superior y en las estribaciones del edificio. Los marines, se encontraban armados” aseguró el responsable español de la Base Naval.
Desde esos momentos, durante la tarde, noche y madrugada se sucedieron entrevistas y explicaciones a medida que se iban conociendo y contrastando mas datos. Desde el gabinete íbamos elaborando notas de prensa en función de las novedades o exclusivas que íbamos obteniendo. Por la noche Carlos Llamas entrevistaba al ex-presidente Felipe González calificaba lo ocurrido como lo mas grave que “Había ocurrido, ni por la dimensión humana de la tragedia, ni por la dimensión política ni de seguridad, desde la segunda guerra mundial”… añadía “si los países democráticos del mundo pusieran en común la información de que disponen en materia de terrorismo y coordinaran su esfuerzo podríamos empezar por decirle a los ciudadanos que se puede acabar con el terrorismo internacional”… aseguraba que “el escudo antimisiles no tiene nada que ver con este tipo de riesgos” y advertía que habrá un “antes y después, las consecuencias de este hecho van a ser incalculables en todos los sentidos”. Terminaba criticaba irónicamente la reacción de George Bush “me ha tranquilizado que reaccione de una manera que, probablemente no va a dar toda la tranquilidad que se esperaba, y parece una contradicción”.
En Localia
Siete plantas mas abajo, en Localia, Manu recordaba que “al llegar a la redacción todo estaba ya patas arriba. Aun no se hablaba de atentado pero sí de catástrofe. Todo el mundo buscaba la manera de armar un informativo especial en directo. Cada uno aportaba lo que tenía o sabía. Recordé que un amigo, Javier Ruiz, antiguo redactor de economía de la SER, estaba en esos meses estudiando en la Universidad de Columbia en Nueva York. Como no tenía su teléfono americano subí corriendo a la SER a pedirlo. Allí, mientras lo anotaba, junto a Jesús Gallego, redactor de deportes, vimos, entre gritos de incredulidad, como caía la primera de las dos torres, curiosamente la última que recibió el impacto de un avión. En ese momento ya se hablaba de atentado. No conseguí contactar con Javier Ruiz hasta mucho más tarde, porque no estaba en Manhattan. Se había ido de vacaciones a Florida y estaba intentado encontrar un coche de alquiler para recorrer en 24 horas la distancia que hay por carretera entre Miami y Nueva York por la ruta 95”. Urko Gabilondo, hijo de Iñaki, se puso al frente del informativo especial que duró varios días, incluso semanas, si contamos los boletines horarios que se estuvieron haciendo. CNN+ y agencias no paraban de servir imágenes, a cada cual más trágica”.
Ya de noche al salir de la radio bajé a coger el metro en Ópera pasando por la Puerta del Sol donde se habían empezado a reunir en una manifestación improvisada cientos de ciudadanos asustados y preocupados. Al llegar a casa no pudimos dormir. Paloma y yo intentamos tranquilizar a nuestra hijas. No dormimos y a primera hora de la mañana regresé a la radio.
A Manu le había sucedido algo parecido: “Paseé por Gran Vía hasta Plaza de España con María Maján, una redactora de Localia que estaba tan impresionada como yo. Hablamos de lo sucedido y de lo vivido, la contradicción que siente el periodista cuando está en medio de una tragedia histórica que es noticia”. A las doce de la noche tomé la decisión de ir a la Puerta del Sol y comprar todas las primera ediciones de los periódicos del 12 de septiembre. Había que guardarlas”.
La mañana del día 12 entre las muchas entrevistas y análisis se produjeron dos momentos muy emotivos. Iñaki Gabilondo en una conversación con la madre de una española que trabajaba en las Torres Gemelas trasladaba la ansiedad de ésta ante la ausencia de noticias de su hija: “Hasta las cinco de la tarde no me pudo llamar. Yo llamaba a todos los teléfonos pero todos estaban comunicando. No tenía noticias de nada. Era para salir loca. Si hubiese sido pájaro hubiese estado allí en media hora”.
IÑAKI: Me dicen que tiene usted una hija que es directora de una escuela de idiomas y que estaba en la torre.
PILAR: Sí.
IÑAKI: ¿En qué piso de la torre?
PILAR: En el 55
IÑAKI: ¿Y qué ha pasado?
PILAR: Gracias a Dios a ella no le ha pasado nada. Les dio tiempo de bajar por las escaleras corriendo, entre ella y otra compañera, además de la gente de otros sitios.
IÑAKI: Bajó 55 pisos por las escaleras, ¡caray! ¡Y nada más bajar se derrumbaría la torre!
PILAR: Sí, a los cinco minutos creo que se derrumbó.
IÑAKI: ¡Eso sí que es salir viva de milagro!
PILAR: Es decir que ha vuelto a cumplir los años.
IÑAKI: Cuando usted tuvo noticia de lo que estaba ocurriendo en Nueva York, sabiendo que su hija estaba trabajando en la torre estaría angustiada, porque supongo que no pudo establecer comunicación con ella pronto.
PILAR: Claro, hasta las cinco de la tarde no me pudo llamar. Yo llamaba a todos los teléfonos pero todos estaban comunicando. No tenía noticias de nada. Era para salir loca. Si hubiese sido pájaro hubiese estado allí en media hora.
IÑAKI: ¿Cuánto tiempo lleva su hija en Nueva York?
PILAR: Cinco años.
IÑAKI: Bueno, ahora ya sabe que está bien.
PILAR: Sí, gracias a Dios. Hace un ratito hemos estado hablando, porque ella estaba muy nerviosa, no podía dormir, y me ha llamado para ver cómo habíamos pasado nosotros la noche…
Mas tarde otra madre, la del jugador del Unicaja de Málaga, Darren Philips, narraba su vivencia dentro de una de las Torres Gemelas: “Estaba en el piso 35 del edificio 1 y de repente oímos un ruido pero como abajo estaban haciendo obras no sabíamos lo que era. El edificio vibró y empezamos a oír gritos: ¡no tengáis miedo, no os pongáis nerviosos, vamos a evacuar el edificio!. Nos decían que no nos aglomeráramos que bajáramos tranquilamente, que no corriéramos, que bajáramos poco a poco. Llegamos hasta el piso 26 o 28 y empezó a entrar agua. Empezaron a saltar chispas y nos dijeron que el agua era mejor que cualquier otra cosa. Salimos del edificio y empezaron a caer cristales. Nos decían: esperad un momento, no podemos salir y tuvimos que salir por la calle del Oeste, y allí había un panorama dantesco, gente gritando y llorando, realmente era una escena dramática. Dentro de lo que cabe no fue tan dramático si pensamos que ya lo he hecho antes. Lo hice en el `93 con la primera explosión que vivió la Torre. Mucha gente de mi grupo ya lo había hecho, ya había estado en la misma situación en el `93”.
El 14 de Septiembre Gemma Nierga hablaba en la Ventana con el doctor Luis Rojas Marcos, director de Corporación de Hospitales Públicos de Nueva York analizando los comportamientos que “las personas que están dispuestas a dar su vida por una idea fanática entran en un túnel de fanatismo donde la vida de los demás forma parte de esa cruzada ciega a la que ellos pertenecen y por la que están dispuestos a dar su vida”. Por otro lado se refería al impacto sobre los ciudadanos “habrá un porcentaje de la población 4 o 5% que desafortunadamente sufrirán el síndrome postraumático que puede durar más tiempo, lo que implica que tendrán pesadillas, tendrán dificultad en dormir, en concentrarse, que pueden desarrollar fobias a las alturas, a los ascensores, al sonido de los aviones...”. Se refería así mismo sobre la situación hospitalaria que había sido abrumadora, pero “el problema en este momento es un problema de rescate de personas probablemente muertas. el otro problema es el impacto emocional que esta tragedia está teniendo en la población”.
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Cómo lo contó la radio
La inmediatez de la radio supo responder al reto de la información de ahí que todas las cadenas llevaron a sus oyentes la tragedia del atentado contra Estados Unidos con diferentes prioridades.
COPE:
- Boletín de las tres de la tarde primera información.
“Comenzamos con una última hora que nos llega desde Nueva York donde un avión de pequeño tamaño se ha estrellado contra una de las dos Torres Gemelas de la capital neoyorquina provocando numerosos destrozos en la últimas plantas del edificio que se encuentra en llamas, mientras una gran nube de humo cubre en estos momentos el cielo de Nueva York. Se desconoce en estos momentos el alcance del accidente que ha tenido lugar hace escasos minutos”.
- A las nueve se retransmite el partido de fútbol Roma-Real Madrid.
- A las doce al finalizar ‘La Linterna’ entra José Antonio Abellán con ‘El Tirachinas’.
OCR:
- Boletín de las tres de la tarde primera información.
“Rápidamente nos vamos hasta EE UU, se acaba de conocer que un avión se ha estrellado contra una de las Torres Gemelas en la ciudad de Nueva York. Establecemos conexión con nuestro corresponsal en Nueva York”.
- A las nueve de la noche no retransmite el fútbol, sigue con un programa especial sobre los atentados.
- A las doce comienza ‘Supergarcía’. José Mª García habla acerca del atentado en su programa.
RNE:
- En ‘El diario de las dos’ a las 14,50 aprox. se da la primera información
“Tenemos una noticia de última hora que no podemos de momento ampliar, pero que puede ser sin duda importante por las imágenes que estamos viendo en televisión. Parece que un avión se habría estrellado contra las Torres Gemelas de Nueva York. Estamos esperando para el próximo boletín informativo la confirmación los datos de nuestro corresponsal en Washington”.
- A las nueve transmite el partido Roma-Real Madrid.
- Programación normal con informativo ’24 horas’.
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La envergadura del atentado, las sensaciones de esos días, los sentimientos y reflexiones son difíciles -casi imposible- de llevar al lector a la hora de transcribir recuerdos. Con el paso del tiempo aquella tragedia fue aumentando su dimensión terrorista, política y humana hasta cambiar definitivamente la historia de la humanidad y las costumbres de la sociedad. Un año después todos los programas de la Ser hicieron una programación especial durante dos días, concretamente Carlos Llamas realizó Hora 25 desde la denominada ya “Zona 0”.
Próximamente: ¿Dos directores generales?
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